Pero el
motivo del presente trabajo no es el análisis histórico,
sino que se centrará en la disciplina deportiva número 5
amparada por la organización MLAIC que se practica con
pistolas civiles o militares de chispa y cañón de ánima
lisa. Se la denomina Cominazzo en honor a la célebre familia
de armeros italianos.
Este tipo de
pistolas que se usan en competiciones MLAIC, originales o
réplicas, no suelen ser armas del tipo militar, sino más
bien las de procedencia civil. Armas equilibradas, con
elementos de puntería y llaves de encendido más precisas.
También suelen ser de calibres sensiblemente inferiores,
aunque nunca por debajo de los 11 m/m, no tanto porque no
existan originales de pequeño calibre, pocas, sino porque el
reglamento lo establece como límite.
El
reglamento MLAIC la describe como sigue:
Nº 5 Cominazzo - Individual
Original y Réplica - Equipo nº 25 Wogdon (Original y/o
Réplica), y nº 41 Egg (solo Originales).
A) Arma: Pistola de un solo tiro, de
pedernal y ánima lisa. Diámetro interior mínimo de 11 mm
(0.433").
B) Miras: Contemporáneas a su época.
C) Blanco: De pistola MLAIC C50 metros (ISSF
pistola 50m).
D) Posición: De pie.
E) Distancia: 25 metros.
F)
Proyectil: Solo esférico.
Descargar reglamento MLAIC
vigente.
Cominazzo
forma parte
de las seis (6) disciplinas de arma corta amparadas por
el calendario MLAIC. Es una de las menos practicadas por las
dificultades técnicas que supone
su práctica en condiciones
de total efectividad deportiva, el disparo (encendido de la
carga) no siempre es lo rápido que debiera. Las
especialidades favoritas, Mariette (revolver 25 mts),
Kuchenreuter (pistola de duelo percusión) y Donald Malson
(revolver 50 mts) por este orden, no entrañan ningún
problema de encendido, y aunque todas y cada una de ellas
tiene sus particularidades, en general son menos complicadas
desde el punto de vista técnico, que no deportivo.
En un principio no sabía
cómo afrontar este trabajo, pues aunque personalmente he
obtenido buenos resultados deportivos, han sido más los
fracasos. Bien es cierto que estos van intrínsecamente
unidos a la práctica de cualquier deporte, si bien en esta
especialidad son particularmente frecuentes. Y es por ello
que resulta más útil buscar la regularidad antes que las
marcas excepcionales, que llegarán a base de esfuerzo y
tenacidad.
Disparar con precisión un
arma corta de este tipo no es nada fácil, sino todo lo
contrario. El sistema de encendido no es instantáneo y
provoca retardos que dificultan seriamente la precisión, y
en ello radica la máxima atención de los tiradores,
conseguir que desde la orden de disparo hasta que el
proyectil abandona el cañón, pase el menor tiempo posible.
Pero este es un tema que se tratará más adelante.
En cualquier caso, escribir sobre
esta especialidad deportiva genera muchas
contradicciones en el autor, y en ocasiones tienes la
sensación de que sería mejor dejarlo. No es una ciencia
exacta, como no lo es ningún otro aspecto de la vida o
del deporte, pero en Cominazzo de agrava por la enorme
cantidad de variables que influyen y que cambian tras
cada disparo o golpe de la llave.
Soy muy consciente de que en nuestro
país existen verdaderos aficionados al tiro con armas de
chispa que no participan en eventos oficiales por los
motivos que sea. También a ellos va dedicado este
trabajo.
El motivo por el que este proyecto
queda circunscrito a la competición oficial, es a causa
del rigor, pues solo la competición oficial es
controlada y regulada de forma que podamos tenerla como
referente indiscutible.
